El pan de leche casero es una receta que evoca recuerdos de infancia, momentos compartidos en familia y el cálido aroma de pan recién horneado impregnando el hogar. Este pan, suave y esponjoso, es perfecto para desayunos, meriendas o como acompañamiento de tus platos favoritos. A continuación, te presentamos una receta detallada para que puedas elaborar el mejor pan de leche casero y sorprender a todos con tu habilidad culinaria.
Ingredientes:
- 300 g de leche entera
- 50 g de mantequilla cortada en trozos
- 20 g de levadura fresca prensada
- 60 g de azúcar blanca
- 550 g de harina de fuerza
- 1.5 cc de sal
- 1 huevo ligeramente batido
Preparación:
- Preparación inicial: Comienza engrasando ligeramente un bol grande y resérvalo. Esta será la cuna donde nuestra masa iniciará su primer proceso de fermentación, crucial para obtener esa textura esponjosa y suave que caracteriza al pan de leche.
- Activación de la levadura: En un recipiente adecuado, combina la leche tibia (a unos 37ºC, temperatura ideal para activar la levadura sin matarla), la mantequilla, la levadura prensada y el azúcar. Mezcla suavemente a velocidad 2 durante 2 minutos. Este paso es vital, ya que el azúcar alimenta a la levadura, permitiendo que el pan crezca y adquiera su textura perfecta.
- Incorporación de los ingredientes secos: Añade la harina y la sal al vaso con la mezcla de leche. Amasa durante 3 minutos en modo espiga. La harina de fuerza es esencial en esta receta, ya que su alto contenido de gluten garantiza un pan más esponjoso y con mejor estructura.
- Primera fermentación: Traslada la masa al bol engrasado, cubre con film transparente o un paño húmedo y deja reposar en un lugar templado. Espera hasta que la masa doble su volumen, lo cual tomará aproximadamente 1 hora. Este proceso es crucial para desarrollar el sabor y la textura del pan.
- Formado del pan: Una vez que la masa ha duplicado su tamaño, prepárate para darle forma. Divide la masa en tres partes iguales y forma un cordón con cada una. Trenza los cordones y coloca la trenza en una bandeja de horno previamente preparada con papel de hornear.
- Segunda fermentación: Cubre la trenza con film transparente o un paño húmedo y deja que suba de nuevo en un lugar templado, hasta que doble su tamaño, aproximadamente 30 minutos. Este segundo levado es clave para asegurar una miga aún más esponjosa.
- Horneado: Precalienta el horno a 180ºC. Pinta la superficie del pan con huevo batido para darle un acabado dorado y brillante. Hornea durante 25-30 minutos o hasta que el pan esté dorado y suene hueco al golpearlo ligeramente en la base.
- Enfriamiento: Es esencial dejar enfriar el pan antes de cortarlo para evitar que la miga se aplaste y para preservar su textura perfecta.
Este pan de leche casero no solo es delicioso, sino que también es una muestra de amor y dedicación. Al seguir estos pasos detalladamente, garantizas un resultado que no solo satisfará tu paladar, sino que también te llenará de orgullo. Este pan es ideal para compartir en desayunos familiares, como base para deliciosos sándwiches o simplemente para disfrutar de su sabor y textura únicos.
Recuerda que la clave de un buen pan de leche casero reside en la paciencia y el cuidado en cada paso del proceso. Desde la activación de la levadura hasta el horneado final, cada detalle cuenta para lograr ese pan perfecto.
